Las oficinas modernas no pueden prescindir de las impresoras. Para funcionar a pleno rendimiento, es necesario imprimir cientos de hojas cada día. Con un uso tan activo, el recurso del cartucho de tóner se consume rápidamente y la impresora pronto deja de imprimir. ¿Qué hacer en estos casos? Hasta hace algún tiempo, los usuarios resolvían este problema acudiendo a una tienda de la marca donde compraban un cartucho nuevo. Sin embargo, hoy en día parece un gasto imprudente de dinero. Para solucionar el problema, tiene que llamarnos y rellenaremos su cartucho viejo con una nueva porción de tóner. Una recarga típica de un cartucho Brother (ej.TN-2175) lleva a nuestros especialistas entre diez y quince minutos.

